Me he decidido a mostrar algo de mi vida. Quiero que sepáis qué es la vida para mí: experiencias y sensaciones
El gato
estaba escondido en el patio de la casa. Ellos dos jugaban en el corredor de la
casa y la madre atendía las tareas del cole.
De
repente oyeron un maullido a lo lejos, parecía venir de entre las losetas de
piedra que había en el patio de la casa. Los niños se asustaron y con cara de
sorpresa preguntaron a la madre que había sido eso. Ellos empezaron a gritar diciendo “¡es un gato, es un gato! ¿no? ¡son más! ¿ama de donde viene? ¡Es de
ahí!”.
Y
entonces miraron detrás de la loseta de piedra y vieron los más lindos gatitos
que habían visto nunca. La mayor quiso tocarlos pero la gata le asusto. El
pequeño quiso coger uno y su ama le ayudó. La gata no puso reparo y nos dejó
coger un gatito. Maulló y nos pareció tan bonito que quisimos guardarlo como un
secreto para nosotros.
Esa
tarde el sol lucía, la tarde era tranquila y el tiempo corría a nuestro favor,
para jugar a ser gatos. Bonito verano de vacaciones en Galicia. Un recuerdo
para no olvidar los dos niños y su madre.
Olga
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Qué relato más bonito y la foto entrañable
ResponderEliminar¡Hola Olga! qué recuerdo tan entrañable. esos son los que nos despiertan una sonrisa y nos alegran el día. gracias por compartirlo. Vir
ResponderEliminarBonitos recuerdos. Felicidades!!!!
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