CARPE DIEM
Hoy es 19 de Julio lunes. Hace un tiempo espléndido, el cielo está completamente azul y el sol brilla en todo su esplendor.
He pasado una mala racha
en la que no tenía ganas de hacer nada, sólo me apetecía estar en la cama, por
lo tanto, en casa hacía únicamente lo imprescindible.
Ahora me encuentro mejor
y tengo muchas ganas de hacer cosas.
Doy gracias a Dios, a la
Vida, al Universo por la madre tan bondadosa que tuve, por mis dos hermanos que
son tan humanos y por mi cuñada tan especial que tengo, que ojalá vivan
muchos años.
Tengo dos brazos y dos manos que me permiten: abrazar y ser abrazada por mis seres queridos, acariciar a alguien que queremos, escribir pequeñas historias, comprar en el supermercado, pasar la fregona por los suelos, hacer la comida, limpiar los cristales, pelar unas patatas...
Tengo dos piernas que me permiten andar sola o en compañía de mi hermano del alma,subir y bajar las escaleras, pisar las hojas secas que caen de los árboles en otoño, nadar en la piscina, por descontado, con la ayuda de mis brazos y mis manos, en el mar no lo hago porque me da respeto, bailar al compás de una música melodiosa…
Tengo dos ojos que me
permiten ver: a las personas que quiero, aprecio y viceversa, a los niños jugar
en los parques porque son un regalo del cielo, la comida que voy a comer, un amanecer o un atardecer, leer un buen
libro, un concurso de cultura general en la televisión, la variedad de colores que existen…
Tengo una nariz que me
permite oler: el salitre del mar, la tierra mojada después de haber llovido, la fragancia de las rosas, el olor tan atrayente que hay en una pastelería…
Tengo dos oídos, gracias
a los cuales puedo oír: las voces de otras personas, el ruido tan gratificante
de las olas del mar, las risas de los niños, las primeras palabras de los
peques, una conversación con una buena amiga, una bella canción, escuchar la sabiduría que transmiten los ancianos...
Tengo una boca que me
permite saborear: un rico helado en verano, las comidas que hago, aunque
reconozco que no soy una cocinillas, unas ricas galletas o mejor
sino un buen pastel, una tortilla de patatas con una ensalada, un café en la terraza de un bar que es una actividad que me encanta, por cierto, inflar un globo…
Me encanta mojarme los pies en la orilla de la playa, sentir el viento en mi cara y en mi cuello es una sensación única, el
placer que me produce darme una ducha y sentir cómo cae el agua por mi cuerpo...
En este proceso para que
yo me encuentre mejor ha influido muchísimo el apoyo de las profesionales de la
Unidad de Día, sus ánimos, sus ganas de que le diera la vuelta a esta
situación, ha sido reconfortante.
Bueno sólo quiero dar las
gracias a todas las bellas personas que me han ayudado, me ayudan y me
ayudarán.
Por todo ello, me
considero una mujer privilegiada.
ole, Gemma, qué bien!1Me alegra verte mejor, consciente de que las pequeñas cosas son las que, al fin y al cabo, nos hacen disfrutar de la vida y de lo que nos rodea. A seguir disfrutando del momento, un beso a tí y a todos y todas las compañeras de la Unidad
ResponderEliminarHola Virginia! Muchísimas gracias por tus bonitas palabras que son la esencia de cómo eres tú. Un beso enorme.Gemma
EliminarQue bonito! Sigue sintiéndote así y sigue escribiendo!
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras de ánimo.Gemma
EliminarTe deseo porque TE QUIERO Sister que sigas así el resto de tu vida, positiva y con ganas de hacer cosas,te mereces lo mejor porque eres un ser muy especial.
ResponderEliminarMuchas gracias BROTHER!
EliminarOjalá que vivamos todos muchos años en armonía, paz y serenidad. Gemma
Genma, tus palabras son un regalo en despertar los sentidos y agradecernos tantas pequeñas cosas que en verdad son muy grandes. Qué sigas disfrutando y encontrando tanta belleza en la vida y nos lo sigas transmitiendo así de bonito.
ResponderEliminarGracias y un abrazo gordo!! Esther
Muchas gracias a ti Esther por tu precioso mensaje.
EliminarEres empática, especial y muy positiva.
Un abrazo de rascacielos. Gemma